El Olivo en Uruguay

El Observador
Martes, 08 Agosto, 2006 - 11:12


Uruguay busca competir en la región apostando a la calidad .- El aceite de oliva toma impulsoLa demanda crece y las hectáreas con plantines aumentan; el sector planifica su expansión .Igual que el 'boom de la soja´ de tiempo atrás, nadie descarta el 'boom del olivo´ dentro de algunos años", anticipa Zohar Hadass, director de SAT, una de las empresas responsables de impulsar la actividad y aumentar las plantaciones de olivos en el país. - Debido a que el único productor de aceite de oliva nacional es el establecimiento Los Ranchos de Fray Bentos (Río Negro), el sector se prepara para abarcar un nicho de mercado que tiene su origen en la alta demanda y en una oferta que sólo satisface el consumo del país, relegando a segundo lugar las exportaciones. Lo cierto es que la industria crece. La reciente Asociación Olivícola Uruguaya -una gremial de la Asociación Rural- agrupa a 20 productores y viene desarrollando actividades de difusión. Este incremento se refleja en las chacras medianas, que se han duplicado en los últimos años, igual que la instalación de empresas dedicadas a la importación de plantines de oliva de máxima calidad, como Caribel SA, de capitales italianos, que se instaló en Fray Bentos. - Las plantaciones abarcan un total de 1.200 hectáreas en Uruguay y, según los productores, para 2007 ese número va a ser de 2.500. "Todos los años compramos más campo", añade Hadass. - Emprendimientos. Múltiples inversores uruguayos, a través de la firma Agrogestión se encargan de promover y crear emprendimientos productivos de olivos. La empresa cuenta con 100 hectáreas de olivares en Lavalleja, además de otros 12 proyectos de plantación en el país. Según Daniel Davidovics, director de Agrogestión, para finales de 2008 la firma va a instalar una fábrica de producción de aceite de oliva para comercializar en el país y exportar, aunque no descartó la posibilidad de trabajar con aceitunas de mesa. "El proyecto está en etapa de plantación y cuidado del monte para llegar a 2008 con una cosecha razonable que nos permita producir aceite de oliva", agrega. - El ejecutivo estima que una vez concretados los tres proyectos de plantación, la fábrica y el vivero, la inversión superará el US$ 1 millón. - La apuesta más fuerte la hace SAT, una empresa israelí que comenzó a estudiar el mercado agroalimentario de América Latina a comienzos de 1996 buscando la mejor opción para sus inversiones. "Tras analizar diversos sectores, nos dimos cuenta que el olivo es el que más futuro tiene en la región", dice Hadass. - Actualmente la plantación supera las 350 hectáreas propias en Pan de Azúcar, más tres fincas de 45 hectáreas cada una, 40 hectáreas asociadas y un vivero con capacidad para 120 mil plantas anuales. A esto se suma un sistema de riego e inyección de fertilización de última tecnología. - Para el próximo año, SAT proyecta instalar una fábrica de aceite de oliva en Pan de Azúcar, con maquinaria de avanzada capaz de producir 500 kilos por hora. La planta será abastecida desde cultivos en Rocha y Lavalleja. Una año más tarde, se abrirá otra de igual características en Durazno para aprovechar la materia prima de ese departamento y de Flores. La última será en Melilla, Canelones. - "La idea es apostar a la calidad no a la cantidad, y así poder competir con Brasil -cuarto exportador mundial de productos de olivicultura- y Argentina", añade. En ese escenario, la empresa planea invertir más de US$ 1.500.000. - El valor de cada máquina para la producción de aceite ronda en los 165.000 euros. - En Chile, la filial de SAT está más desarrollada y este año exportó a Japón lo producido en 3.000 hectáreas. Mientras, en Argentina, importó 60.00 plantas desde Israel, donde se encuentra la casa central que abastece el mercado de Sudáfrica y Australia. El Observador